La historia entre Cesc y el Barça parece estar entrando en una fase clave. Cada día las posturas están más cerca.
Los meses de enero y febrero son más fundamentales de lo que a primera vista parecen. Es en estas fechas cuando las secretarías técnicas empiezan a trabajar en la sombra para reforzar a las plantilla de cara al siguiente curso. Y en Can Barça, todos los esfuerzos se van a centrar en un nombre propio. A día de hoy, el fichaje de Cesc Fàbregas es la gran prioridad del Barça de cara al curso que viene y la orden desde el palco es la de acelerar al máximo su contratación.
La ‘operación Cesc’ va a ser la gran prioridad del despacho de la secretaría técnico de cara al nuevo año.
Primero, porque Joan Laporta desea dejar el club en junio habiendo dejado encarrilada la contratación de un jugador que, a día de hoy, es indiscutible para cualquier precandidatura que aspire a llegar al palco del Camp Nou.
De hecho, el nombre de Cesc es una de las pocas cosas que une a todos los que hasta día de hoy han manifestado su intención de concurrir a la carrera electoral. Cesc, como Guardiola es innegociable.
Y es que el técnico blaugrana puede ser una de las claves para acercar al centrocampista de Arenys al Camp Nou. Guardiola, cuya renovación aún no está cerrada, desea tener a Cesc en su equipo y su llegada podría facilitar el tan ansiado sí del técnico.
Claro está que el Arsenal no lo va a poner fácil y que la operación comportaría un elevado desembolso económico, pero la idea desde dentro del club sería la de afrontar esta negociación como se llevó a cabo hace unos meses la de Ibrahimovic.
En aquel caso, el sueco era la única exigencia del técnico y el Barça, tras los éxitos conseguidos por Guardiola no se vio capaz de negarle nada al entrenador de Santpedor.
Tras seis años en el Arsenal, parece que Cesc ha llegado a la conclusión que su etapa en los ‘Gunners’ puede haber llegado a su fin. Un desenlace que puede acelerarse si se confirman los rumores cada vez más consistentes de que Arsène Wenger puede dejar el Emirates.
El compromiso del centrocampista de Arenys con su técnico es total y si Wenger se fuera del Arsenal, el capitán de los ‘Gunners’ se sentiría liberado de su compromiso con la entidad.
Cesc llegó con 16 años al club de Londres por expreso deseo de Wenger que en estos últimos seis años ha sido una figura fundamental en su formación.
De hecho, este compromiso con el entrenador alsaciano es el que ha contenido los deseos del centrocampista de volver a casa. Cesc es del Barça y nunca ha escondido su amor a los colores blaugrana y atendiendo a su profesionalidad hizo de tripas corazón para eludir la oferta que le planteó el club blaugrana el verano pasado.
No fue el Barcelona el único equipo que puso cerco a Cesc el verano pasado, pues Florentino Pérez también anhelaba su fichaje, pero ahí se impuso la militancia barcelonista del jugador que, además, se siente perfectamente identificado con el Arsenal.
A nivel práctico, la intromisión del presidente del Real Madrid, encarecerá la posible operación. El Barça es perfectamente consciente de este hecho, pero la indiscutible calidad del jugador y el ya comentado aval incondicional de Guardiola haría factible el esfuerzo. En este sentido, las antiguas reticencias del secretario técnico Txiki Begiristain, que no era partidario de pagar por jugadores que en su día se fueron del club ha variado a raíz del gran rendimiento que ha ofrecido Piqué en su retorno al Barça.
sport.es
Los meses de enero y febrero son más fundamentales de lo que a primera vista parecen. Es en estas fechas cuando las secretarías técnicas empiezan a trabajar en la sombra para reforzar a las plantilla de cara al siguiente curso. Y en Can Barça, todos los esfuerzos se van a centrar en un nombre propio. A día de hoy, el fichaje de Cesc Fàbregas es la gran prioridad del Barça de cara al curso que viene y la orden desde el palco es la de acelerar al máximo su contratación.
La ‘operación Cesc’ va a ser la gran prioridad del despacho de la secretaría técnico de cara al nuevo año.
Primero, porque Joan Laporta desea dejar el club en junio habiendo dejado encarrilada la contratación de un jugador que, a día de hoy, es indiscutible para cualquier precandidatura que aspire a llegar al palco del Camp Nou.
De hecho, el nombre de Cesc es una de las pocas cosas que une a todos los que hasta día de hoy han manifestado su intención de concurrir a la carrera electoral. Cesc, como Guardiola es innegociable.
Y es que el técnico blaugrana puede ser una de las claves para acercar al centrocampista de Arenys al Camp Nou. Guardiola, cuya renovación aún no está cerrada, desea tener a Cesc en su equipo y su llegada podría facilitar el tan ansiado sí del técnico.
Claro está que el Arsenal no lo va a poner fácil y que la operación comportaría un elevado desembolso económico, pero la idea desde dentro del club sería la de afrontar esta negociación como se llevó a cabo hace unos meses la de Ibrahimovic.
En aquel caso, el sueco era la única exigencia del técnico y el Barça, tras los éxitos conseguidos por Guardiola no se vio capaz de negarle nada al entrenador de Santpedor.
Tras seis años en el Arsenal, parece que Cesc ha llegado a la conclusión que su etapa en los ‘Gunners’ puede haber llegado a su fin. Un desenlace que puede acelerarse si se confirman los rumores cada vez más consistentes de que Arsène Wenger puede dejar el Emirates.
El compromiso del centrocampista de Arenys con su técnico es total y si Wenger se fuera del Arsenal, el capitán de los ‘Gunners’ se sentiría liberado de su compromiso con la entidad.
Cesc llegó con 16 años al club de Londres por expreso deseo de Wenger que en estos últimos seis años ha sido una figura fundamental en su formación.
De hecho, este compromiso con el entrenador alsaciano es el que ha contenido los deseos del centrocampista de volver a casa. Cesc es del Barça y nunca ha escondido su amor a los colores blaugrana y atendiendo a su profesionalidad hizo de tripas corazón para eludir la oferta que le planteó el club blaugrana el verano pasado.
No fue el Barcelona el único equipo que puso cerco a Cesc el verano pasado, pues Florentino Pérez también anhelaba su fichaje, pero ahí se impuso la militancia barcelonista del jugador que, además, se siente perfectamente identificado con el Arsenal.
A nivel práctico, la intromisión del presidente del Real Madrid, encarecerá la posible operación. El Barça es perfectamente consciente de este hecho, pero la indiscutible calidad del jugador y el ya comentado aval incondicional de Guardiola haría factible el esfuerzo. En este sentido, las antiguas reticencias del secretario técnico Txiki Begiristain, que no era partidario de pagar por jugadores que en su día se fueron del club ha variado a raíz del gran rendimiento que ha ofrecido Piqué en su retorno al Barça.
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